Jesús
30 anys sense una llar
El Jesús volta pel món des de que era jove. Ha estat a diferents llocs d’Espanya i ha dormit en albergs, cases ocupades, cases de companys i en habitacions que s’ha pogut pagar amb els seus pocs ingressos. Des de fa temps viu a Barcelona. Està vinculat a Arrels i li agrada donar un cop de mà sempre que pot.
“Mucha gente no va a los albergues porque le exigen entrar en horas concretas y quizás no les da tiempo porque se están buscando la vida, ya que no cobran nada. También hay gente sin tarjeta de comedor –a la que sólo le dejan ir 3 días- y que si quieres comer debes hablar con una asistenta y entrar en lista de espera.
Eso hace que vayan a por bocadillos de un lado a otro y desespera, cansa a la gente, y le da por beber. Encima deben ir a dormir a albergues con normas que no todos necesitan. Yo pondría condiciones diferentes a la gente que busca trabajo para que tenga más margen, porque si llegan tarde luego no pueden entrar y duermen en la calle. Eso le quita a uno las ganas de todo.
También hay gente que va a descansar y no puede. Debería haber más orden, que se respete, ya que todos estamos en una situación que no nos gusta. Yo, que la vida me ha dado muchos palos, dentro de lo que cabe he tenido suerte porque, tras tanto aguantar, me ha llegado la suerte gracias a ciertas personas. Gracias por todo”.