Las personas que viven en la calle ven vulnerados muchos de sus derechos. En primer lugar, y de una manera más evidente, el derecho a la vivienda. Pero vivir en la calle también comporta no tener derecho a la intimidad, al descanso en condiciones, a la higiene, a tener una condiciones mínimas para llevar una buena salud o a hacer uso del espacio público de manera lúdica.
Además, las personas que viven en la calle a menudo son objeto de agresiones: un 46% manifiesta haber sufrido alguna agresión física o verbal; sufren una constante vulneración de derechos en lo que se refiere a su integridad.
En Arrels trabajamos para defender los derechos de las personas que viven en la calle. Por eso, visibilizamos la situación y los riesgos que sufren y las acompañamos para que conozcan sus derechos y que estos no sean vulnerados.
A menudo las personas sin hogar necesitan acompañamiento para resolver temas administrativos como la tramitación de pensiones, recursos de multas, gestión de embargos o tramitación de temas de extranjería. Nuestro equipo jurídico les asesora en temas de derecho penal, civil o de familia y vela porque puedan resolverlos.
Como entidad que trabaja con personas que viven en la calle, nos posicionamos como acusación popular en procesos judiciales que afectan a las personas que acompañamos o sus derechos colectivos. También intervenimos ante delitos de odio o en caso de que las personas necesiten acompañamiento, para garantizarles el derecho de defensa y la igualdad frente al sistema judicial.
El marco legislativo vigente tiene un impacto directo en la situación de las personas sin hogar, a las que muchas veces no tiene en cuenta. Desde Arrels promovemos cambios en la legislación para garantizar que las personas sin hogar tengan acceso a los derechos básicos, tal y como lo tiene el resto de la ciudadanía. Actuamos para promover una Ley de Sinhogarismo, la Ley de Igualdad de Trato y colaboramos con el mundo académico con tal de visibilizar la situación jurídica de las personas sin hogar.
Nuestro equipo jurídico interviene en asuntos que puedan vulnerar los derechos humanos y participa en litigios estratégicos para el conjunto de las personas que viven en la calle. También trabajamos por establecer mecanismos judiciales que garanticen el derecho de defensa de todas las personas por igual y desarrollamos informes para estudiar situaciones jurídicas de vulnerabilidad y dar respuesta a estas problemáticas.
Durante el acompañamiento diario de las personas, velamos siempre por que conozcan sus derechos y puedan ejercerlos. También explicamos a la ciudadanía que nadie vive en la calle por decisión propia, que tener que vivir en la calle vulnera numerosos derechos y generamos estudios e informes para hacerlo visible. En último lugar, trabajamos para hacer propuestas políticas que cambien la situación de las personas, así como para promover cambios en las políticas públicas que influyan en la situación de las personas sin hogar.