Un menor que ha estado durmiendo en un centro tutelado y que al cumplir la mayoría de edad se ha quedado en la calle, un hombre que hace dos semanas que vive en la calle y necesita saber donde ducharse, un chico que ha perdido el pasaporte y no sabe cómo empadronarse… Durante el 2024, atendimos 1.942 demandas de orientación y asesoramiento. De estas, 1.205 fueron orientaciones que hicimos en nuestro centro abierto, 624 orientaciones telefónicas a la ciudadanía y 113 a entidades, municipios y centros sanitarios que atienen personas sin hogar y no saben cómo resolver la situación.
Cuando una persona sin hogar llega al centro abierto de Arrels, puede venir con varias necesidades no cubiertas. Por un lado, puede necesitar una ducha, ropa o dejar sus pertenencias en la consigna. También podría pedirnos una manta o simplemente tener un espacio en la sala para descansar y cargar el teléfono. Pero, más allá de las necesidades básicas, están las que tienen que ver con la situación estructural de la persona, como por ejemplo el acceso al empadronamiento o al servicio sanitario. En Arrels orientamos a las personas que viven en la calle o que están a punto de perder la vivienda para que puedan conocer los recursos y servicios a los cuales se pueden dirigir para mejorar su situación.
También asesoramos y orientamos vecinos y vecinas que se preocupan por la situación de una persona que han visto en la calle o que vive en su barrio. Además, recibimos las demandas de orientación de trabajadoras de servicios sociales, hospitales y otras instituciones, entidades sociales o colectivos que necesitan conocer la red de recursos a la cual pueden derivar una persona que están acompañando o atendiendo.
El 2024, llevamos a cabo un total de 1.942 orientaciones. Un 62%, 1.205 en total, fueron demandas de orientaciones por parte de personas que vivían en la calle o estaban en otras situaciones de sinhogarismo y que vinieron a nuestro centro abierto. Un 32%, 624 orientaciones, provenían de ciudadanos y ciudadanas preocupados por la situación de alguna persona que sabían que estaba en la calle. El resto de asesoramientos, un 5,8%, los recibimos desde varias instituciones que atienen personas que viven en la calle o sufren situaciones de sinhogarismo.
Quién nos pide asesoramiento?
La media de edad de las personas sin hogar que atendimos el año pasado es de 40 años, la misma que registramos en 2023. En nuestro centro abierto de la calle Riereta orientamos una población marcadamente masculinizada: 88% de las personas que nos pidieron asesoramiento el año pasado eran hombres, 965 en total. Las mujeres que se acercaron a la entidad fueron 132, el 12% restante. Estos porcentajes son similares a los que identificamos en 2023.
En cuanto al origen de las personas que pudimos asesorar, un 18%, 198 en total, tenían nacionalidad española. En segundo lugar, orientamos 151 personas provenientes del Marruecos, un 13,76%, seguidas de las personas de origen argelino, un total de 124, un 11,3%. Desconocemos el origen de 86 de las personas que asesoramos, un 7, 8% del total. El año pasado asesoramos personas de 93 países diferentes.
Ciudadanía y profesionales preocupados por las personas sin hogar
Durante el año 2024, 624 personas nos llamaron al teléfono de centralita para saber qué pueden hacer cuando ven una persona durmiendo en la calle cerca de su casa. La ciudadanía que nos llama también pregunta a menudo por los recursos existentes para las personas sin hogar, se preocupa por una persona en particular que ha visto en su barrio y ya no está donde solía descansar o quiere conocer qué servicios tenemos a disposición de las personas que viven en la calle desde Arrels.
A veces, también recibimos llamadas de técnicas de ayuntamientos, servicios sanitarios o recursos de estancia para jóvenes y adolescentes que no saben dónde derivar una persona que vive en la calle o que está a punto de perder el alojamiento que tiene. “Son profesionales que se preocupan por la carencia de recursos y hacen un seguimiento lo más cuidadoso posible de las personas que atienden. Pero, a veces, se encuentran que no pueden dar respuesta a ciertos casos con los recursos existentes en la red de atención social. Esto pone en evidencia la necesidad de más coordinación y recursos para la atención de las personas sin hogar en todo el territorio catalán”, comenta Beatriz Fernández, directora de Arrels.
En este sentido, durante el año pasado atendimos 113 llamadas de entidades tutelares, centros de acogida, hospitales y otras instituciones que ponen en evidencia las carencias del sistema de atención social.
En la actualidad, el instrumento que tenemos en Cataluña para abordar el sinhogarismo de una manera conjunta en el territorio es el Marco de acción para el abordaje del sinhogarismo 2022-2025. Este marco quiere hacer de paraguas integral y consensuado para que los municipios catalanes tengan más herramientas para atender y ofrecer alternativas a sus vecinos y vecinas sin hogar. Pero hacen falta recursos estructurales y el despliegue del Housing first en Cataluña, para que no haya #nadiedurmiendoenlacalle.
Más información:
– Si quieres conocer las propuestas políticas que basura para paliar el sinhogarismo en Barcelona, entra aquí.
– Si quieres saber que basura en el centro abierto con imágenes, entra aquí.
– Para obtener más información sobro que puedes hacer si ves alguien durmiendo en la calle, consulta este enlace.