En los últimos dos años, Arrels ha detectado 12 casos de engaños o fraude a personas sin hogar atendidas en la entidad. Se trata de casos de estafa muy graves, aprovechando que las personas vivían una situación vulnerable en la calle. Para evitar más situaciones como esta, Arrels ha interpuesto una denuncia ante la Fiscalía Provincial de Barcelona.
Arrels acaba de presentar en la Fiscalía de Barcelona una denuncia que recoge los casos de 12 personas sin hogar víctimas de engaños y fraudes. Se trata de personas que fueron víctimas de las estafas cuando vivían en la calle, con problemas de salud mental y de alcoholismo u otro tipo de adicción, y que en la actualidad cuentan con pocos o ningún tipo de recursos económicos.
Este tipo de situaciones se han detectado “por notificaciones de la Agencia Tributaria que reclaman impuestos impagados de empresas en las que estas personas constan como administradoras; por denegación de prestaciones de la Seguridad Social por constar deudas por impago de autónomos; y por procedimientos judiciales de reclamación de cantidades, entre otros”, tal y como recoge la documentación presentada en Fiscalía.
El objetivo de esta denuncia es poner sobre la mesa la situación de las 12 personas afectadas pero, sobre todo, denunciar que es una práctica habitual acercarse a personas que viven en la calle para intentar engañarlas y cometer fraude con ellas. Esto significa que estas personas “podrían tener problemas para acceder a prestaciones sociales o figurar en listas de morosos, y tener aún más dificultades para mejorar su vida”, afirma el director de Arrels, Ferran Busquets.
Para Arrels, estas personas viven una situación de indefensión total y aún podría haber más personas afectadas pero sin el amparo de ninguna organización que pueda detectar este tipo de engaños y solventarlos.
Arrels empezó a detectar estos casos hace dos años y, en julio de 2013, puso en conocimiento de la situación a la Agencia Tributaria y el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Ahora, la denuncia se lleva ante la Fiscalía -y no siguiendo los procedimientos habituales- por la situación especialmente vulnerable de estas personas sin hogar.
De momento las estafas se han detectado en una docena de personas, aunque otras personas sin hogar vinculadas a Arrels han expresado que cuando vivían en la calle conocieron este tipo de situaciones. Como afirman las doce personas engañadas que presentan su caso a la Fiscalía, el objetivo de la denuncia es “que no vuelva a pasar nunca más, que no se engañe a personas que ya lo están pasando mal viviendo en la calle”.